viernes, 17 de diciembre de 2010

Cap.1...El primer día...

Hoy, 15 de septiembre Alice empezaba en su nuevo instituto. Ella, era alta, pelo castaño y rizado, morena de piel y ojos verdes oscuros.


-¿Donde está el dinero para el desayuno en el instituto?-dijo atacadamente-No sé, buscalo por el salón-contestó la madre-


Alice estubo por el salón buscando el dinero, lo encontró, estaba encima de la televisión. Ya preparada para irse, se despidió de su madre.
-Bueno me voy.-dijo muy nerviosa.-Suerte en tu nuevo día y haz muchos amigos.-dijo la madre. Alice se quedó callada para no decir nada.


Su instituto era grande, con un gran patio en la parte derecha con jardines y aparcamientos. Había muchos chicos y chicas en grupos con sus amigos hablando, riendo, saludandose tras todo el verano. Pero Alice no, estaba sentada en un banco que había en una esquina.
Ya era la hora de entrar dentro de el, todos se dirigían a una gran sala con poca iluminación, un escenario y asientos...


El Director del instituto era un señor alto, viejo, con gafas. Dio su discurso de presentación con todos los profesores nuevos atrás de el. Alice se sentó enfrente  suya, esperando a que diga su nombre para irse con su nueva clase. 


Nombraron su nombre y se dirigió con su profesor. En su clase, se presentaron todos. Pero había un chico que le gustó mucho, se llamaba Kenneth, era Noruego. Sus ojos eran tan brillantes que la propia Alice se podía ver su reflejo en ellos, el era rubio, alto y de piel pálida.


Alice se quedo enamorada de el a simple vista, su deseo ahora mismo sería que fuera su chico ideal o por lo menos que le llegue a un amigo íntimo.
A la hora del recreo estaba una gran parte a la izquierda del instituto jugando, hablando etc. Alice se quedo sola en la cafetería. Vio a Kenneth entrar y se sentó solo en una mesa de la cafetería. Alice no podía contemplar lo que estaba viendo desde la otra punta. Entonces Alice se dispuso ir ha hacerle compañía.


-Hola...¿me puedo sentar aquí?-preguntó tímidamente.
-Claro, ¿por que no?-dijo con una sonrisa blanca en la boca con un  tono grave. Alice se quedo fijada en el casi embobada...
-¿Te pasa algo?-dijo el chico extrañado-
-Am! nada estoy en mi mundo...-dijo Alice fijada en el.
-Bueno...¿de donde vienes tú?-dijo con curiosidad.Ambas miradas se cruzaron.
-Yo... de otro instituto, me cambié porque no tenia amigos. Todos se burlaban de mí.-dijo tristemente, recordando los recuerdos de su pasado.
-Pues yo de otro también, mi caso fue porque me amenazaban unos de 1º de BACH. Nunca llegué a entender el porqué de sus acciones...-dijo tristemente, pero también pesando si podía ayudar a Alice.


Sonó el timbre todo el mundo a clase, ellos hablaban por el camino sobre su vida. Al llegar a la segunda planta, pasaron por un grupo de chicas que miraron con caras de asco a Alice, ella no sabia que hacer, asi que miró hacia otro lado. Kenneth, llegó a la clase, donde estaban sus amigos. Kenneth, se los presentó a todos ellos, porfín Alice hace amigos.


Ya era la hora de irse a casa, Alice no quería irse para aburrirse en su casa con su madre y aguantando a sus hermanos pequeños. Pero no le quedó otra, de alejarse de su primer amigo que para ella ya era mucho.


Su casa era un chalet en una urbanización cerca de una playa en Valencia. Era grande, de colores fríos, grandes ventanas, un jardín con un culumpio para dos y muchas flores.
Alice entró fastinadamente, se dirigió hacia su cuarto. Era grande, con mucha iluminacion, de color verde pastel y blanco, en la ventana tenía un escritorio con su portátil. Donde se asomó y vio a Kenneth cabreado, estaba chillando, así que ella fue a preguntarle porque estaba así. Le contestó porque se le había olvidado sus llaves de casa. Alice se le ocurrió invitarle a comer, para seguir conociendole.


-¿No te importa que me quede en tu casa no...?-dijo Kenneth con preucupación.-¡Claaaaarooo que noo!, quiero que pruebes lo que sé cocinar-dijo con una sonrisa en la boca, fijamente en la mirada de el.
Kenneth, sonrió con una sonrisa picarona. Entraron en la casa de ella, el, se sorprendió porque su casa era mas o menos parecida.
Se dirigieron para la cocina, donde ambos se ayudaron mutuamente para hacer la comida: un plato de spaghetti con queso.


-Están buenos.-dijo con una sonrisa fijada en Alice.
-Gracias...a ti por ayudarme...-ella sonrojada por su piropo. Alice ve una nota encima de una de las encimeras de la cocina; 

NOTA

Alice, hoy llegaré tarde por el trabajo. Recuerda que tienes que ir a por tus hermanos a las 5 de la tarde. 


Un beso! =)




Alice se quedo pensando en lo que iba ha hacer con el mundo...
-¿Qué pone en la nota?-dijo Kenneth con mucha curiosidad.
-Mmm...que mi madre llegará tarde por el trabajo y tendré que recoger a mis hermanos a las 5 de la tarde.-dijo sin ganas.
-Pero en ese tiempo podemos hacer muchas mas cosas de mientras.-dijo Kenneth con muchas ganas y su gran sonrisa dedicada para Alice.
Sonrió y se quedo pensando en lo que iba ha hacer con Kenneth...




Kenneth, se quedo pensativo. A el le empezaba a gustar Alice, para el era su todo, la única chica que sus ojos pudieron ver con claridad.


Ambos se dirigieron hacia el salón donde se pusieron a ver la televisión. De repente, Kenneth, alzó el brazo por encima del hombro a ella. Se puso muy nerviosa y sonrojada, pero para seguir su rollo, puso su cabeza sobre su hombro.


Kenneth tenia que irse. Alice le acompañó hacia la puerta donde se despidieron. Para ella era lo peor, alejarse de el...
El, se acercó hacia ella...la besó...
-Gracias-dijo el con un tono cariñoso y su mirada fijada en ella
-De...nada...-con un tono tembloroso, con sus ojos brillantes contemplandoles.


Su beso, le llegó hasta el último sentido de ella. Fue tierno, dulce y a la vez amargo para ella...

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